La agresividad estructural
Hay entre las personas afectadas por el relativismo moral, muchas que debido al trajín cotidiano son agresivas. En lugar de mejorar, aprender, ir cultivando resiliencia se hacen más y más agresivas.
Pronto terminan culpando a todo el mundo. Todos "sufren", trabajan, se esfuerzan y padecen todo menos que ellas. Y no lo llevan con ninguna paz...
Basadas en esa falsa premisa, que seguramente será también alguna verdad interna de envejecimiento cognitivo precoz, atacan y son agresivas.
Justifican el estar siempre enojadas, el despreciar a los demás. ¿Todos conocemos personas así, no es cierto?... es por la modernidad.
Por las hiper-exigencias e hiper-estimulaciones que vivimos. Y por el desgaste cognitivo que implica. El desgaste cerebral, ¿se entiende?.
Ya hay personas "quemadas" por ser liberales. (Capítulo 1 de: http://bit.ly/2aoIHXI.) Pero quemadas por exigencia cerebral aún más. Es que se vive mal.
"Calidad de vida" llamamos en realidad a vivir trabajando, con muchas presiones. Y el relativismo moral no ayuda, claro. Lo justificamos todo.
Pisar a los demás, no respetarnos, etcétera. Usar a otros. ¿Cómo no usar, si nosotros mismos nos evaluamos según un inmediato utilitarismo!
Amigos para... fútbol, salir; parejas para... lucirnos, avanzar socialmente. Todo eso genera desdicha, inmoralidad, y por ese camino agresividad también.
El camino de la desdicha-agresiva. Viene prendado de inmoralidad. Empieza con el relativismo moral. Cuando dejamos valores. Valores de buena educación.
De respeto, entendimiento; tolerancia. De que nada justifica el atropello, sin importar cuán difícil sea nuestro día. Que nada justifica despreciar, ser agresivos, atrevidos... (Jamás.)
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